Caminante, el camino no se hizo al andar;
el camino no conoce el destino del azar.
No conoce ni las hormigas que,
merodean.
Me hice sabio observando hormigas en su mudo
azar.
La utopía muda, muerta por siempre, muerta en la piedra.
La utopía muda, muerta por siempre, muerta en la piedra.
El otoño con caracolas y uva de niebla
destroza chozas y sus hojas caen
sin gracia a merced del tiempo.
Aprendí a vivir y entendí
siguiendo como hormiga
la hoguera que me espera.
Todo recuerda a aquella risa del árbol de olivos.
Porque te has muerto para siempre
como todos los muertos de la Tierra,
como todos los muertos que se olvidan
como todos los muertos que se olvidan
Como hormiga, eres la utopía
la desconocida; veneno del pulcro atardecer.
Desaparece, vuelve y esconde
en actores que olvidan
la esencia de perfil y gracia.
Vivan justificando la libertad de las decisiones,
con hormigas seleccionadas , cerrando e ignorando
las hormigas que la utopía dicta para la salida.
Pero nadie te conoce, entre rutinas, apariencias
aprendidas. Hasta que un día olvidas, quien fue
aquel y en que matadero de vida consumes día día.
El éxito es estabilidad y la estabilidad no es utopía ni vida.
Es la esclavitud filosófica mas ingeniosa.
Si la confusión es sombra en toda etapa.
No juzgues a terceros por pasado o pasos dados
es momento de entender que una vida bien servida
merece ser vivida.
Nunca es tarde cuando la dicha es buena.
El mal de amores anda de luto esperando que olvide mis versos.
Silenciosos caprichos marchan lejos en este Escribano.
Aunque la vida no parezca que esta viva; es de importancia contemplar el caos y su orden.
Dentro de patrones razonables que solo un ojo comprende una esencia rica en experiencia.
Experiencia mejor que los anos y el tiempo.
Entre los minutos la probabilidad creo la relatividad doblegando mi esencia a símbolos que la expresan.
Limitado por un alfabeto...
Escale hacia la cima , disfrute el clima, el paisaje y el viento.
Entre los minutos fui lo que soy. Entre ellos aprendí que el vivir son verbos que expresan un sentir que no desea partir.
Es el avaro y eterno huésped , quien conspira con ira. Enriquecido de la experiencia de terceros y no la propia...
Si... experiencia... la fantasía de burguesía asesinada por terceros.
Es el eterno huésped , el eterno beso en versos.
Es el tiempo, perspectiva confusa en forma de concepto, la prisión mas ingeniosa creada.
Felicitaciones. No se necesita rimar para ser poeta.
ResponderEliminarNo soy Tomasi......Soy Wiso........jajaja
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